El líder de la célula Terrorista Voluntad Popular, Leopoldo López, convirtió su presidio en un negocio que lee llenó los bolsillos debido a las grandes tajadas de dólares que recibía de empresarios que hoy acusan de corruptos.
Pronto saldrá a la luz información que compromete considerablemente la falsa honestidad del líder del partido de la ultraderecha Voluntad Popular, Leopoldo López y Lilian Tintori, quienes convirtieron la prisión en un negocio, que se acabó luego de que el gobierno otorgara casa por cárcel a López.
López y su muy showsera esposa, haciéndose las víctimas solicitaban a los empresarios, grandes cantidades de dólares, para preparar “su defensa”, con el compromiso de no revelar los negocios poco turbios, en lo que estaban relacionados los empresarios
La extorsión le funcionó a Leopoldo López, durante el tiempo que estuvo en prisión, lo que le permitió amasar una fortuna en dólares, para asegurar el futuro de su familia y para financiar el terrorismo en el país.
Alejandro Plaz, ex miembro de la ONG Súmate y ahora una de los cerebros estratégicos de la célula terrorista Voluntad Popular, fue el encargo de crear estructuras en paraísos fiscales para recibir cifras que oscilan entre 500 mil y 5 millones de dólares.
Con la cárcel también se les acabó el negocio y por ello han encargado a sus diputados para extorsionar a los mismos que los financiaron, utilizando para ello la inerte Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional en sesacato, espacio legislativo que ocultaría la trama de corrupción, si le pagaban una vacuna a Leopoldo López y su camarilla.
Redacción Lechuguinos