El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró que durante la década de los 90 el gobierno de esa nación estaba plagado de agentes de la Central de Inteligencia Norteamericana (CIA), quienes tuvieron que ser apartados y regresados a su país.
Según Reseñó la agencia RT, Valdimir Putin, puso, durante una reunión del Consejo para la Sociedad Civil y los Derechos Humanos, el ejemplo de los agentes estadounidenses dentro del Gobierno ruso para demostrar cómo los países extranjeros intentan interferir en los asuntos internos del país.
«A principios de la década de los años 2000 ya depuré a todos, pero a mediados de la década de 1990 teníamos como asesores y empleados oficiales del Gobierno […], como se puso de relieve después, a miembros del personal de la CIA», dijo el mandatario.
El dirigente ruso precisó que estas personas incluso fueron encausadas en EEUU ya que, como empleados de la CIA, habían participado en la privatización en Rusia, lo que es contrario a la legislación estadounidense.
Según Putin, algunos especialistas estadounidenses estaban presentes en instalaciones de armas nucleares rusas e incluso tenían la bandera estadounidense sobre sus escritorios.
«Vivían y trabajaban allí. No necesitaban instrumentos tan sutiles de injerencia en nuestra vida política porque, de todos modos, lo controlaban todo», subrayó.
No es la primera vez que Putin menciona la interferencia de Washington en los internos asuntos de su país, en particular inmediatamente después de la desintegración de la URSS, durante la era de Borís Yeltsin (1991-99). En 2013, declaró que agentes de la CIA habían trabajado en el entorno de Anatoli Chubáis, el ex viceprimer ministro que supervisó los procesos de privatización en el país durante la traumática transición al capitalismo.