Lisette es madre de dos hijos y, ante la angustia y la presión de que afuera conseguiría una mejor calidad de vida, dejó su patria y se fue para Perú.
Hoy es una de las connacionales que se acogió al Plan Vuelta a la Patria, diseñado por el Ejecutivo Nacional para repatriar voluntariamente a los venezolanos que deseen regresar.
En conversación con la periodista de teleSUR Madelein García, contó que le bastaron 5 meses para darse cuenta del error cometido.
Asegura que si el motivo para emigrar era la violencia que hay en Venezuela, pues se encontró con una realidad bastante atroz.
“Allá no solo te roban sino que te violan. El hombre con la mujer es violento”, dijo. Al tiempo que contó el maltrato laboral al que es sometido el emigrante venezolano.
Asegura que en Venezuela nunca pasó hambre pero en Perú sí, porque aunque en los supermercados hay de todo es difícil tener acceso a los productos por el alto costo y el bajo salario.
“No somos nada fuera de nuestro país”, afirma. Alertó a otros compatriotas a no dejarse engañar por la matriz de que en el extranjero se estará mucho mejor que en la patria.
“Hay mucha xenofobia”, declara esta venezolana que dice estar dispuesta a empezar desde cero en su tierra.
Redacción Lechuguinos