El seudoescritor Mario Vargas Llosa está solicitado por la justicia española luego de develar tremenda tramoya de evasión de impuestos.
Mario Vargas Llosa, premio Nobel de Literatura en 2010, no está de acuerdo con la deuda y ha decidido mantenerla en suspenso con la idea de llegar a los tribunales.
Para poder mantener la deuda suspendida y pleitear contra Hacienda por la vía administrativa, el escritor ha tenido que pedir una hipoteca privada con el fisco por la cantidad que se le reclama.
El escritor ha puesto como aval la casa de casi 300 metros cuadrados que tiene en el centro de Madrid, una de sus muchas propiedades repartidas por ciudades de todo el mundo.
El piso no está a nombre de Vargas Llosa, sino que es propiedad de la sociedad holandesa Jurema BV, de la que el escritor peruano es el máximo accionista.
El uso de sociedades no es algo nuevo para Vargas Llosa. El autor de Lituma en los Andes fue uno de los nombres que aparecían en los papeles de Panamá.
Según develó en abril de 2016 El Confidencial, el premio Nobel fue dueño de Talome Services Corp. junto con su exmujer, Patricia Llosa, durante algo más de un mes en el año 2010 hasta escasos días antes de recibir el galardón internacional.
Vargas Llosa y su expareja no habrían creado esta sociedad offshore desde cero, sino que la compraron al bufete Mossack Fonseca, en el ojo del huracán tras las revelaciones del Consorcio Europeo de Periodistas de Investigación (ICIJ).
Talome Services estaba radicada en las Islas Vírgenes Británicas, que figura en la lista de países considerados paraísos fiscales por España.
Redacción Lechuguinos – Aporrea