Donald Trump, ha demostrado poco interés para luchar contra el coronavirus, ocupándose más de la discordia postelectoral.
Según publicó el jueves la cadena estadounidense ABC, la ausencia de Trump tras las presidenciales ocurre cuando la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, se propaga por la mayor parte del país y la nación continúa batiendo récords de nuevos casos y hospitalizaciones.
Además, muchos de sus asistentes y aliados dieron positivo en la prueba de la COVID-19 después de la fiesta mantenida la semana pasada en la Casa Blanca donde Trump, quien se niega a aceptar el triunfo de su rival demócrata, Joe Biden, festejó su presunto triunfo.
Durante la semana pasada, excepto de una breve visita al Cementerio Nacional de Arlington el miércoles para honrar a los veteranos, Trump no ha participado en otros eventos anunciados públicamente. De hecho, este es el silencio más largo durante su Presidencia desde hace cuatro años.
También, el pasado 5 de noviembre cuando los medios estadounidenses hablaron de la victoria muy probable de Biden, Trump participó en una conferencia de prensa ofrecida en la Casa Blanca y aseguró que había un fraude electoral y no aceptará el resultado.
El subsecretario de Prensa, Judd Deere, en una entrevista concedida a ABC, recalcó que el presidente sigue luchando duro por unas elecciones libres y justas y, al mismo tiempo, cumple con todos sus deberes para poner a Estados Unidos primero.
A su vez, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, declaró que Trump en este momento estaba dejando que sus abogados tomen la iniciativa sobre asuntos postelectorales, y alegó que sigue trabajando duro para el pueblo estadounidense sobre la COVID-19 y otros asuntos.
“Escucha al presidente, escúchalo en Twitter, lo escucharás a él en el momento adecuado”, explicó el jueves en el programa de “Fox & Friends”. Desde la semana pasada Trump solo está en contacto con el pueblo a través de su cuenta de Twitter.
Pese a alegatos de McEnany, Trump tuitea mucho sobre el fraude electoral, pero apenas ha mencionado la pandemia, excepto para promover una teoría conspirativa de que las noticias positivas sobre una vacuna se retrasaron para dañarlo políticamente.
Por otra parte, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, subrayó que Trump, y sus partidarios deben trabajar con Biden, en la lucha contra la COVID-19 en lugar de negar la derrota del mandatario en las elecciones.
Los comentarios de Pelosi se produjeron luego de que los casos de coronavirus en EE.UU. alcanzaron otro récord diario el 11 de noviembre, con 140 543 reportados.
Redacción Lechuguinos-HispanTV
