Chris Murphy, senador estadounidense por el estado de Connecticut, cuestionó el apoyo de su país al proyecto Guaidó y preguntó por qué “¿sigue (EEUU) reconociendo a Guaidó como líder de la Nación, si no controla a los militares, ni al gobierno y ni siquiera ocupa un cargo?”
Además, -sigue en sus mensajes- “ahora, después de perder un año tratando de trabajar en un plan de transición, Guaidó está boicoteando las próximas elecciones legislativas”.
De esta forma, el político estadounidense se une al prolífico grupo que abandona (con mayor o menor estridencia) el fallido Proyecto Guaidó. “Después de un año y medio, Maduro es más fuerte, la influencia estadounidense es más débil y no hay un camino viable para restaurar la democracia”, aceptó.
Sus siete mensajes en la red fueron a propósito de la audiencia celebrada por el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EEUU sobre La Política Hacia Venezuela lo que consideró “un estudio de caso de negligencia diplomática” que ha empoderado “al dictador” Maduro.
Lamentó que el intento de golpe de Estado de ABR2019 hizo ver a EEUU tonto y débil. “Fue un vergonzozo debacle (…) pues todos los que nos dijeron que apoyarían a Guaidó se quedaron fríos y el plan fracasó pública y espectacularmente”.
Escribió también que faltó trabajar o neutralizar a Rusia, Cuba y China, -principales «patrocinadores» de Maduro- pues Guaidó, estaba listo para capitalizar y restaurar la democracia. “No hicimos ningún esfuerzo significativo para moverlos y los tres países se mantuvieron sólidamente detrás de Maduro”.
Además, consideró que poner a Elliot Abrams (a quien llamó el símbolo del imperialismo estadounidense en América Latina) fue un error porque “ayudó a Maduro a reunir a los militares y gran parte del país contra EEUU y arrojó a Guaidó como un peón estadounidense”.
También lanzó munición guesa contra (John) Bolton quien segun el senador “hundió las prometedoras conversaciones de transición dirigidas por Noruega. Además, criticó a (Mike)Pompeo por «un plan de transición que es una copia al carbón del que matamos”.
La pérdida de apoyo de diversos sectores de EEUU es cada vez más notoria aunque la Casa Blanca ha intentado siempre, hasta ahora, un “control de daños” que suavice la caída libre de su delfín político.
La Tabla
