Donald Trump podría convertirse en el primer presidente en la historia de EE.UU. que es sometido a juicio político dos veces durante su mandato. Este lunes, los demócratas de la Cámara de Representantes presentaron formalmente una petición de destitución, el ‘impeachment’, en la cual acusaron a Trump de «incitar deliberadamente a la violencia contra el Gobierno de EE.UU.» luego que el pasado miércoles sus partidarios asaltaran el Capitolio.
Para que el mandatario saliente sea destituido, primero la Cámara de Representantes debe votar sobre los artículos del juicio político como lo hizo en 2019 cuando acusó formalmente a Trump de abuso de poder y obstrucción al Congreso. El segundo paso es un juicio en el Senado, donde una mayoría calificada de dos tercios (67 de 100 senadores) debe estar de acuerdo en condenar al presidente.
¿Qué podría perder Trump en caso de ‘impeachment’?
- No podría postularse para presidente en 2024
Tras ser condenado por una mayoría calificada de dos tercios en el Senado, los senadores también podrán votar si lo descalifican para ocupar un futuro cargo público, aunque en este caso solo es necesaria una mayoría simple para llegar a un consenso, recoge Bloomberg.
El artículo 1 de la Constitución de EE.UU. estipula que los juicios de ‘impeachment’ pueden incluir «la inhabilitación para ocupar y disfrutar de cualquier cargo de honor, confianza o lucro en EE.UU.».
Expertos consultados por Reuters coinciden en que los demócratas, que tomarán el control del Senado a finales de enero, tienen una posibilidad real de impedir que el actual mandatario republicano se postule para presidente en 2024.
Por otra parte, Trump podría también perder muchos de los privilegios otorgados a los expresidentes por la Ley de Expresidentes de 1958.
- No recibirá la pensión vitalicia de 219.200 dólares al año
- Sus vacaciones anuales no serán pagadas
- No obtendrá fondos para una oficina y personal
Estos privilegios le son retirados a cualquier presidente que haya sido destituido mediante un proceso de juicio político. No obstante, Trump aún tendría derecho a recibir protección del Servicio Secreto.
Al mismo tiempo, no está claro si una condena dictada una vez finalizado el mandato, como la que potencialmente enfrenta Trump, constituye realmente una destitución. Al respecto, expertos citados por Bloomberg consideran que el Congreso podría intentar enmendar la ley para asegurarse de que Trump pierda sus privilegios.
Asimismo, es posible que el mandatario enfrente cargos criminales después de dejar el puesto.
RT
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