Mike Pompeo planea incluir a Cuba en la lista de EE.UU. de países patrocinadores del terrorismo internacional a tres semanas de traspaso de poder a Joe Biden.
Funcionarios del Departamento de Estado estadounidense, bajo las ordenes de Pompeo elaboraron una propuesta para volver a considerar a Cuba como un Estado terrorista, después de quitarlo de la lista negra en 2015 y durante la gestión del expresidente Barack Obama, debido a normalización de los nexos bilaterales.
Según el diario estadounidense The New York Times (NYT), publicado el martes, esa designación provocaría dificultades para el próximo Gobierno de EE.UU., presidido por Joe Biden, por mejorar las relaciones entre Washington y La Habana.
No obstante, la medida todavía requiere la aprobación del secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, mientras que solo faltan tres semanas para que el mandatario electo del país juramente como próximo inquilino de la Casa Blanca, el 20 de enero.
A su vez, demócratas criticaron esa medida, calificándola de un cambio de última hora en la política exterior del país. “Es otro truco de este presidente (Trump) con menos de 23 días para el final (de su cargo)”, anunció Gregory W. Meeks, el representante demócrata de Nueva York y el nuevo presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara, en una entrevista telefónica con NYT, emitida el martes.
Al respecto, demócratas y expertos en política exterior piensan que el magnate neoyorquino y sus funcionarios buscan maneras para dificultar los primeros meses de la gestión de Biden. Si Pompeo acepta la propuesta, Cuba será el cuarto país, después de Siria, Irán y Corea del Norte, en la lista negra de Washington.
Sin embargo, el país antillano nunca ha aceptado los alegatos de Washington en su contra, tachando la política de Trump ante la isla de un “fracaso rotundo”. “Casi llega a su fin el cuarto y último año del actual gobierno de EE.UU. comprometido con los sectores más rabiosamente anticubanos de ese país, ha desatado contra Cuba en este período una guerra sórdida, con la absurda pretensión de ponernos de rodillas, de romper la resistencia de la Revolución y obligarnos a realizar concesiones, tanto en política exterior como en nuestra realidad interna. Su fracaso es rotundo y notorio”, indicó el 17 de diciembre el presidente cubano, Miguel Díaz- Canel, en clausura del Sexto Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) de Cuba.