La Policía Federal de Brasil concluyó, luego de una investigación, que Bolsonaro cometió un delito al filtrar documentos confidenciales.
La Policía Federal concluyó este miércoles que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, cometió un delito al filtrar en una retransmisión en vivo documentos confidenciales con intención de desacreditar el sistema electoral. Sin embargo, no acusó al presidente de esta nación por estar aforado y el caso queda ahora en manos del Supremo Tribunal Federal (STF).
Según la Policía, la divulgación de esos datos confidenciales tuvieron repercusiones perjudiciales para la administración pública y se utilizaron para «difundir» información «conocida como falsa».
La corporación envió un documento al juez Alexandre de Moraes, responsable del caso, quien mandará las conclusiones a la Fiscalía. Esta deberá decidir si denuncia, sigue investigando o archiva el caso.
Hace unos meses, el mandatario divulgó en las redes sociales una investigación de la Policía sobre un supuesto ataque al sistema interno del Tribunal Superior Electoral (TSE) en 2018. El juez Alexandre de Moraes incluyó ese asunto en un proceso sobre difusión de noticias falsas y ataques a las instituciones.
El mandatario lleva años con una campaña de desprestigio del sistema electoral brasileño, uno de los más informatizados del mundo y vigente desde 1996. Las tensiones que provocaron sus comentarios llegaron incluso hace unos meses a las calles con ataques directos a Moraes.
La semana pasada, Bolsonaro no se presentó en la sede de la Policía Federal donde debía comparecer, pero según la delegada policial Denisse Ribeiro este hecho no impidió el análisis del caso.
Por su parte, el martes, el presidente del TSE, el juez Luís Roberto Barroso, consideró que la filtración de Bolsonaro sirvió para que las milicias digitales pusiesen en peligro la seguridad del sistema.
«El presidente de la República filtró la estructura interna de las Tecnologías de la Información del Tribunal Superior Electoral. Tuvimos que tomar una serie de pasos para fortalecer la seguridad cibernética de nuestros sistemas para protegernos. Faltan adjetivos para calificar la actitud deliberada de facilitar la exposición del proceso electoral brasileño a ataques de delincuentes», afirmó.
