La OMS, llama a la calma ante mutaciones de Covid-19 en Reino Unido y Sudáfrica y desmiente que este fuera de control.
La nueva variante del coronavirus descubierta en el Reino Unido, que se propaga más rápidamente, «no está fuera de control», afirmó la Organización Mundial de Salud (OMS), tra llamar a la calma y pedir que se sigan aplicando las medidas sanitarias que ya demostraron su eficacia.
Las declaraciones se dan luego de que se hacían eco a las del ministro de Salud británico, Matt Hancock, que el domingo aseguraba que «la nueva cepa del coronavirus estaba fuera de control”, reseñó AFP.
En Ginebra, Ryan estimó este lunes que «aunque el virus se ha vuelto un poco más eficaz en términos de propagación, se puede detener».
«Las actuales medidas son las buenas. Debemos continuar haciendo lo que hemos hecho» hasta ahora, afirmó el alto responsable.
«Puede que tengamos que hacerlo con algo más de intensidad y durante algo más de tiempo para asegurarnos de que podemos controlar este virus», añadió.
Asimismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) también aclaró este lunes que la nueva variante del coronavirus identificada en el Reino Unido no es la misma que la que se ha descubierto en Sudáfrica, como se había señalado en numerosas informaciones, de acuerdo a lo reseñado por la agencia de noticias EFE.
La confusión se originó en el hecho de que las dos cepas se identificaron casi simultáneamente.
«Los virus mutan, es natural y hay que esperarse a esto», dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en la rueda de prensa.
«En los últimos días se ha informado de nuevas cepas del virus del COVID 19 en Sudáfrica y Reino Unido, los virus mutan en el tiempo, es algo natural y hay que esperar esto. UK ha informado de que esta nueva variante del virus se transmite más fácilmente pero no hay una evidencia hasta ahora que cause enfermedades más complicadas o mayor mortalidad. La OMS está trabajando con científicos para comprender como estos cambios genéricos afectan en el comportamiento del virus (…)», resaltó Adhanom.
Numerosos países del mundo cerraron sus fronteras desde el domingo a las personas procedente del Reino Unido o de Sudáfrica, donde también se detectó una variante del virus, para evitar que se siga propagando.
Suiza, por su parte, impuso este lunes una cuarentena retroactiva de diez días a las personas llegaron al país alpino desde estos dos países desde el 14 de diciembre.