El sarcerdote Numa Molina no comparte convertir la iglesia en un espacio para la política partidista como lo han hecho los obispos de la CEV.
El sacerdote jesuita Numa Molina pidió que la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) no se convierta en un partido político ni se convierta la devoción en una oportunidad para hacer proselitismo.
En entrevista con Vladimir Villegas, el sacerdote pidió a todos los obispos que realmente “sean lo más pastores posibles“, ya que cree que hace falta “discernimiento” y estar más “cercanos al pueblo”.
Asimismo, consideró que la iglesia “debe estar abierta a cualquier línea de pensamiento”.
Al ser interrogado con respecto a su disidencia de las posturas oficiales de la Iglesia y si ésta es aceptada o no, indicó: “A nivel de la Iglesia universal se permite. Es diversa. Se puede dialogar y se puede vivir”.
Sin embargo, señaló que, “La política es una gran cosa. De hecho, dijo Pío XI en el año 27 la expresión caridad política”.
“Yo no estoy diciendo que tenemos que entrar en el mundo de lo político, en el partidismo. No puedo convertir la devoción de un santo, por ejemplo, una tradición popular, en una oportunidad para hacer política partidista”. Algo que según dijo, el Episcopado ha hecho.
Redacción Lechuguinos