A Netanyahu no le importa estar sumido en escándalos de corrupción ni su supuesto estado delicado de salud, pues está celebrando la masacre que el ejército israelí ejecutó contra palestinos desarmados
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se ha convertido en referencia en los niveles de descaro para el mundo, pues ha tenido la desfachatez de elogiar a los soldados sionistas que asesinó brutalmente a 17 palestinos y herido a otros 1400.
Este personaje no se inmuta ante la masacre, pues afirmó que los soldados israelíes actuaron contundentemente para «proteger su soberanía y la seguridad de sus ciudadanos». Es decir, se alegra que el ejército sionista haya matado a más de una decena de palestinos desarmados.
17 palestinos fueron brutalmente asesinados por fuerzas de seguridad israelíes cuando se celebraba una concentración en la frontera de Gaza, denominada Gran Marcha del Retorno, que conmemora el Día de la Tierra.
Con tanques y francotiradores, las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés), atacaron a los palestinos dejando además 1400 heridos.
Ante esta acción, pocas instituciones defensoras de derechos humanos en el mundo se han pronunciado para rechazar esta brutal agresión contra el pueblo palestino, que cada día pierde su territorio.
Redacción Lechuguinos
