En el Ministerio Público, reposan suficiente elementos de convicción que involucran a Ortega Díaz en una red de extorsión cuando era fiscal.
Luisa Ortega Díaz, durante sus funciones como Fiscal general, hizo del Ministerio Público (MP) el centro de operaciones de una red de extorsión en donde Zair Mundaray, quien fue nombrado por ella como Director Técnico-Científico e Investigaciones del MP, era el encargado de cobrar los sobornos que pararían en manos en sus bolsillos.
Zair Mundaray, era conocido dentro de la Fiscalía del Ministerio Público, bajo la nefasta administración de Luisa Ortega Díaz, como “la mano que mece la cuna”, pues era él quien en nombre de su patrona, extorsionaba y cobraba los sobornos.
Según fuentes del Ministerio Público, el historial delictivo de Ortega Diaz y Zair Mundaray, data de hace varios años, con la llegada de la prófuga de la justicia venezolana a la Fiscalía, en un principio, comenzó con cobros pequeños para “resolver” todo rápido y poco a poco, su industria de extorsión fue creciendo.
Las investigaciones adelantadas por el Ministerio Pùblico actual, con pruebas demuestran que las tarifas que cobraba Ortega Díaz y su albacea rondaban entre 120 y 160 mil dólares por casos.
Personajes involucrados en corrupción en contra del Estado, tráfico de drogas, entre otros era sus preferidos y era allí donde Mundaray y Luisa Ortega, ponían el ojo.
Las investigaciones adelantadas indican que este par de delincuentes, se hicieron de una fortuna de más de 2.5 millones de dólares a punta de extorsión.
A medida que avanzan las investigaciones, se van descubriendo más casos de sobornos y extorsión, que incrementan considerablemente la fortuna mal habida amasada por Luisa Ortega.
Empresario confesó en Miami haberle pagado sobornos
Un empresario corrupto, que desfalcó a PDVSA, confesó que pagó a Luisa Ortega un millón de dólares en soborno, para que no lo acusara.
En un reportaje de la agencia gringa de noticias AP, se revela el juicio de un empresario corrupto, dónde confesó que pago a la ladrona de Luisa Ortega, un soborno por un millón de dólares, para que no lo investigara por el desfalcó de PDVSA, bajo la administración del delincuente, Rafael Ramírez.
Según la agencia AP, “la exfuncionaria, Luisa Ortega, no se menciona por su nombre en el caso federal de Miami. Pero al declararse silenciosamente culpable el lunes de un solo cargo de conspirar para defraudar a Estados Unidos, el empresario Carlos Urbano Fermín admitió haber pagado alrededor de $ 1 millón en sobornos a un ‘fiscal de alto’ rango en Venezuela como ‘seguro’ contra cualquier investigación sobre su extensa contratos de construcción con el gigante petrolero estatal PDVSA”.
En el reportaje se señala que “el funcionario venezolano no identificado es Ortega, dijeron las dos personas familiarizadas con el caso. Acordaron dar los detalles solo si no se citaron por su nombre porque se suponía que no debían discutir la investigación, que aún está en curso”.
AP resalta que -los aliados del líder de la oposición Juan Guaidó se unieron en su defensa, llamándola la fiscal principal «legítima» de Venezuela y buscando aprovechar su deserción para construir una coalición más amplia contra Maduro-.
“Según una oferta fáctica de tres páginas muy redactada que acompaña a su declaración de culpabilidad, Fermín dijo que entre 2012 y 2016 sus empresas obtuvieron numerosos contratos importantes de tres empresas conjuntas de PDVSA con compañías petroleras extranjeras, entre ellas China National Petroleum Company, Rosneft de Rusia y Total de Francia. SA”, indica la agecia gringa de noticias.
Asimismo señala AP que “a principios de 2017, la oficina de Ortega tenía una investigación sobre la adjudicación de los contratos con las empresas conjuntas en la Faja del Orinoco que se encuentran en la cima de las reservas de crudo más grandes del mundo, según la petición de Fermín. Casi al mismo tiempo, fue abordado por un abogado en Venezuela cercano al fiscal de alto rango anónimo con la promesa de que podría anular cualquier investigación criminal, dijo Fermín”.
El empresario confesó que realizó el pago como una «póliza de seguro», el intermediario «informó al acusado que tenía la capacidad de prevenir cargos criminales», según el expediente judicial.
Posteriormente, dijo Fermín, transfirió aproximadamente $ 1 millón desde Estados Unidos a cuentas en beneficio del funcionario venezolano anónimo, incluido un pago de $ 100,000 a un banco en el suburbio de Coral Gables en Miami.
Debido al millonario pago, nunca se presentó cargos contra las empresas de Fermín mientras Ortega era fiscal jefe, aunque su sucesor, Tarek William Saab, lo hizo poco después de asumir el cargo en 2017, cuando acusó a Fermín y sus dos hermanos, arrestando a uno, concluyó el reportaje de AP.