Luis Olavarrieta, hizo uso de sus redes sociales, para llamar a la violencia en el país, delito establecido y tipificado en la legislación venezolana.
Haciendo uso de su cuenta en la red social Twitter, el supuesto “comunicador”, Luis Olavarrieta, hizo un llamado abierto a la violencia, para generar caos y alterar el orden público en el país.
Aprovechándose, de algunos pequeños focos de violencias generados por la derecha venezolana en diferentes poblaciones del país, Olavarrieta uso su cuenta de Twitter, donde cuenta con 626 mil 8 seguidores, para instigar a la violencia y poner en peligro la tranquilidad pública del país, en medio de la pandemia por Covid-19.
“En estos momentos, una espiral de protestas en varios estados del país. Escasea de todo menos la arrechera. Pueblo en la calle”, escribió Olavarrieta en su cuenta de Twitter, en un claro llamado a la violencia.
El artículo 265 del Código Orgánico Procesal Penal vigente establece que “El Ministerio Público, cuando de cualquier modo tenga conocimiento de la perpetración de un hecho punible de acción pública, dispondrá que se practiquen las diligencias tendientes a investigar y hacer constar su comisión, con todas las circunstancias que puedan influir en su calificación y la responsabilidad de los autores o autoras y demás partícipes, y el aseguramiento de los objetos activos y pasivos relacionados con la perpetración”.
Mientras que el Código Penal Venezolano en su artículo 285, indica que “Quien instigare a la desobediencia de las leyes o al odio entre sus habitantes o hiciere apología de hechos que la ley prevé como delitos, de modo que ponga en peligro la tranquilidad pública, será castigado con prisión de tres años a seis años”.
El plato está servido, el mismo Luis Olavarrieta lo puso en bandeja de plata y se labró su camino directo a una celda del sistema carcelario venezolano.
En estos momentos, una espiral de protestas en varios estados del país. Escasea de todo menos la arrechera. Pueblo en la calle.
— Luis Olavarrieta (@LuisOlavarrieta) September 28, 2020
Redacción Lechuguinos