Los presidentes Pedro Pablo Kuczynski y Juan Manuel Santos piden a gritos que se dispongan y apliquen más sanciones contra Venezuela
La derecha mundial está desesperada, pues el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, llama a otros gobiernos del hemisferio para sumar voces en su cometido de lograr una invasión militar en Venezuela.
Con eufemismos como “ayudar a la situación crítica de Venezuela”, el mandatario peruano quiere que los demás gobiernos de derecha apoyen la injerencia.
“Hay un país, que tiene las reservas petroleras más grandes del mundo, que está aquí al lado, y que está pasando un rato terrible”, indicó Kuczynski en el Centro de Formación de la Cooperación Española, junto a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos.
Esto deja claro que su intención es obtener un beneficio de vender a Venezuela a los intereses imperiales, permitiendo así el saqueo criminal de recursos naturales de la nación bolivariana.
Mientras se lleva a cabo la reunión, ciudadanos peruanos se mantienen en las calles en protestas contra la medida otorgada al ex presidente Alberto Fujimori, además de la nueva reforma que un sector del Congreso quiere aplicar al sector estudiantil.
Esto ocurre después de que voceros del gobierno peruano retirara la invitación al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para la Cumbre de las Américas a celebrarse en Lima el 13 y 14 de abril próximo.
Bajo el nombre de IV Gabinete Binacional Colombia-Perú, Juan Manuel Santos y Kuczynski se han mantenido en pie, en cuanto a los ataques contra el gobierno de Nicolás Maduro, sobre todo desde el anuncio de las elecciones presidenciales, que se llevarán a cabo el próximo 22 de abril.
Junto a estos personajes, se suman las cancilleres María Holguín, Cayetana Aljovín, además de los respectivos gabinetes ministeriales.
La cooperación terrorista crece a medida que el curso del evento electoral se acerca, pues su intención es cumplir con el guión del gobierno de Donald Trump, enemigo confeso del proceso bolivariano.
Redacción Lechuguinos