El Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) junto a la Policía colombiana arremetió con todo contra artistas, músicos y nuevos creadores de Medellín y Colombia
El Centro Plazarte, se convirtió en un campo de batalla cuando los efectivos de seguridad colombiana comenzaron a arrojar gases lacrimógenos, bombas de aturdimiento y balines de pintura a más de 80 artistas y cultores que defendía el lugar, por negarse a desalojar la casa que durante 9 años ha sido el espacio cultural para el desarrollo de las artes en ese país.
La negativa de desalojar la casa proviene desde que un juzgado municipal ordenara el descabellado desalojo de la propiedad para entregarla nuevamente a quien la mantuvo en total abandono durante años. Negando así la posibilidad de que ese espacio siguiera contribuyendo con la promoción de valores, cultura y una vida sana a decenas de colombianos que tanto lo necesitan.
Redacción Lechuguinos