Seis militantes de movimientos sociales brasileños comenzarán una huelga de hambre para exigir la liberación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
En las inmediaciones del Supremo Tribunal Federal (STF), este martes en horas de las tarde inicia el ayuno de activistas en apoyo a Lula Da Silva y condenando su injustificada encarcelación.
“Son pocas las personas que tienen el coraje de tomar una decisión así, pues no se trata de un ayuno de uno o dos días, sino de una huelga sin fecha final”, ha declarado el miembro de la coordinación del Frente Brasil Popular (FBP) João Pedro Stédile.
El activista ha aclarado que ninguno de los huelguistas “es suicida”, sino que “aman la vida” y “quieren vivir”, pero ha insistido en que si tras días de ayuno sucede “algo grave” con alguno de ellos, no serán ellos los “culpables y responsables”.
La huelga de hambre forma parte de una agenda de movilizaciones de los movimientos populares que incluye, entre otras acciones, la llegada a la ciudad de Curitiba, donde Lula permanece recluso desde hace más de tres meses, de una caravana procedente de la región brasileña del Semiárido.
En todo Brasil se están realizando protestas convocadas por el Partido de los Trabajadores (PT) hasta el 15 de agosto, cuando la agrupación registrará en un gran acto en Brasilia la candidatura del expresidente.
El dirigente del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Jaime Amorim, ha afirmado que “Lula es un preso político y cualquier impedimento a su candidatura configura una medida autoritaria contra la soberanía popular”.
En Brasil hay un conflicto judicial en torno a la figura de Lula después de que el 7 de julio el juez Rogerio Favreto, del Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF-4), diera la orden de liberarlo de inmediato, que revocó poco después el juez federal João Pedro Gebran Neto.
Redacción Lechuguinos