Julio Borges le echa leña al fuego que lo señala de traidor, saludando enérgicamente a los diputados de la patria
El día de ayer, 9 de enero, la Asamblea Nacional (AN) que sigue en desacato y con la inconstitucionalidad a flor de piel, intentó decidir el juicio por abandono del cargo del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro.
El nuevo presidente de la Asamblea, Julio Borges, quien vale menos que una moneda de un bolívar pues la elección del mismo fue al mejor estilo de la 4ta República, demandó una salida electoral a la crisis venezolana como la forma para que “sea el pueblo el que se exprese a través del voto”.
Por supuesto, sabemos que esta idea es una “barbaridad” como lo explicó Héctor Rodríguez a la salida del Palacio Federal Legislativo, “desde el punto de vista jurídico”, ya que el presidente Maduro no ha abandonado el cargo en ningún momento de su período como jefe del Poder Ejecutivo de Venezuela.
Sin embargo, antes de esto, logramos capturar una fotografía del saludo muy energético del nuevo presidente de la Asamblea golpista a Víctor Clark, diputado del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), y la sonrisa del diputado Héctor Rodríguez, jefe del Gran Polo Patriótico (GPP).
Ante esto, indignados y enfurecidos, varios diputados de la tolda naranja terrorista de Voluntad Popular (VP) y los 4 pelagatos de Vente Venezuela declararon el susto y la ira que les causó la imagen, pues continúan desconfiando del presidente por el que ellos mismos votaron, probablemente porque están claros de la desunidad y la sospecha que causa un personaje como Julio Andrés Borges.
Redacción Lechuguinos
