Financial Times, asegura que altos funcionarios del Gobierno de Trump, quieren la renuncia de Guaidó, por ineficiente y dejarlos en ridículo.
El diario británico Financial Times aseguró que funcionarios de la administración Trump han reconocido «en privado» que la oposición encabezada por Juan Guaidó requiere un «cambio de táctica» y «debe renunciar a sus pretensiones de ser un gobierno en la sombra y volver a hacer campaña en las calles».
En un extenso trabajo firmado por los periodistas Gideon Long y Michael Stott, se detalla abundantemente en las razones que, a su juicio, han signado el fracaso de Washington en conseguir la salida forzosa de Nicolás Maduro de la presidencia de Venezuela, pese a la dura política de sanciones implementada por Estados Unidos y el respaldo irrestricto proporcionado Guaidó.
De acuerdo con informantes referidos por Financial Times, a pesar de la retórica incendiaria del mandatario saliente y de las evidentes presiones, amenazas y acciones implementadas desde la Casa Blanca, es claro que la política estadounidense falló en su objetivo y «es Guaidó quien parece roto», mientras que Maduro «parece más fuerte que nunca», precisa el medio londinense.
Entre las razones que se esgrimen en la investigación periodística de Long y Stott para explicar la caída del autoproclamado presidente interino, están su creciente pérdida de popularidad, debida en buena medida por su abierto respaldo a las medidas coercitivas unilaterales aplicadas por Estados Unidos, su vinculación con la fallida incursión armada del pasado mayo y su negativa a participar en los comicios parlamentarios del 6 de diciembre.
Luis Vicente León, analista político afín a la oposición, le dijo al Financial Times que la popularidad de Guaidó, al mes de octubre de 2020, se ubicaba en 25%.
León puntualizó que si bien «la mayoría de la gente rechaza a Maduro» y «quiere un cambio de gobierno», «la mayoría de la gente también rechaza la abstención y rechaza las sanciones» y también reconoció que «nunca había pronosticado un peor momento para la oposición», que el lapso entre enero y marzo de 2021.
En el texto también se destaca que «el 5 de enero, Guaidó perderá su presidencia de la Asamblea Nacional y, con ella, la base legal para su pretensión de ser el líder interino de Venezuela, ya que una nueva generación de legisladores pro Maduro tomará posesión».
De allí que, en opinión de los autores, los gobiernos que optaron por reconocer a Juan Guaidó como «presidente encargado», se encuentren en un verdadero dilema, pues retirarle su respaldo, implicaría, de facto, reconocer al presidente venezolano, a quien han tildado de dictador y cuyo gobierno han considerado ilegítimo desde enero de 2019.
En el seno de la Unión Europea, ha trascendido que «diplomáticos europeos han preparado un documento para los ministros de Relaciones Exteriores de la UE que ofrece tres opciones: continuar con el ‘status quo’, abandonar el reconocimiento de Guaidó por completo o un camino intermedio: reconocerlo como el líder de una oposición unida pero no como el presidente interino», es poco probable que opten por continuar reconociendo el pseudo gobierno de Guaidó.
A este respecto, Financial Times asevera que «varios estados miembros están descontentos con tratar a Guaidó como el presidente legítimo del país cuando los hechos sobre el terreno apuntan claramente en la dirección opuesta» y por ello estarían considerando reconocerlo como «líder de la oposición».
Estos gobiernos, de acuerdo con el medio británico, estarían preocupados por el precedente que podría sentar el reconocimiento de un gobierno ilegítimo en sus propios países, una situación que se hace todavía más acuciante en América Latina, una de las puntas de lanza dentro del cerco diplomático dispuesto por Washington contra Maduro
Los funcionarios estadounidenses parecen estar al corriente del riesgo que una jugada semejante representaría para la estabilidad local.
De acuerdo con declaraciones de «un enviado» de Estados Unidos «en la región», recogidas por Gideon Long y Michael Stott, el caso de Perú, que en una semana tuvo tres presidentes, puede resultar particularmente elocuente para ilustrar su punto: «¿Qué pasaría si otros países decidieran reconocer a uno de los presidentes anteriores de Perú?», inquirió retóricamente el funcionario.
En todo caso, el escenario internacional que se encuentra bajo la égida de la Casa Blanca, parece estar considerando seriamente el retirar, aunque fuere formalmente, el reconocimiento otorgado a Juan Guaidó como «presidente interino» de Venezuela, aunque la saliente administración Trump haya extendido el control que este grupo tiene sobre los activos venezolanos en territorio estadounidense por un año más y no se prevean cambios sustanciales respecto a la relación con Venezuela en el gobierno de Joe Biden.
Empero, apuntan, el fracaso de la política estadounidense hacia Venezuela heredado por el presidente electo, representará uno de los «mayores desafíos de política exterior» con los que habrá de lidiar su gobierno.