Cada día aumentan los casos de xenofobia que sufren los venezolanos en las fronteras, por parte de grupos violentos y llenos de odio
Un grupo de venezolanos en el extranjero fueron víctimas una vez más del odio y la xenofobia, al ser echados de un colegio abandonando que les servía como refugio y quemada sus pertenencias.
El hecho se dio en el municipio brasileño de Roraima, frontera con Venezuela, donde los habitantes arremetieron contra los refugiados por la muerte de un morador, durante una pelea entre venezolanos.
Luego del suceso, 300 residentes marcharon en rechazo a la presencia de los venezolanos; destruyeron algunas pertenencias, prendieron fuego a otras y expulsaron a los cerca de 50 refugiados que vivían en el lugar.
Los inmigrantes salieron horrorizados del sitio, dejando sus pertenencias y alimentos entre los que se encontraban varios paquetes de harina que fueron rasgados y esparcidos por el lugar antes de prender fuego a las prendas de vestir.
Algunos de los residentes tuvieron el descaro de no considerar estas acciones de odio como “vandalismo” cuando fueron entrevistados por medios locales, por el simple hecho de que no atacar a quienes se encontraban dentro del edificio abandonado.
Este evidente acto de xenofobia se suma al ataque a un grupo de venezolanos en Febrero, cuyo lugar de refugio fue incendiado por un guyanés, que dejó cuatro heridos de gravedad.
Redacción Lechuguinos