Alfred Zayas, quien ocupó distintos cargos directivos en la ONU, desde al año 2012 hasta el mes de abril de este año, dijo lo que muchos ocultan sobre Venezuela.
El informe sobre Venezuela presentado este lunes por el experto independiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Alfred de Zayas, revela detalles cruciales respecto a la llamada “crisis humanitaria”, de la que se acusa a Venezuela de estar sumida.
El referido informe expone la visión del relator de la ONU de lo que fue su visita a Venezuela en noviembre de 2017. Allí se refiere que, en materia financiera el bloqueo contra la nación caribeña, ha impedido al Gobierno Nacional realizar los pagos correspondientes a la adquisición de alimentos y medicinas, esto como consecuencia del agravamiento de las operaciones financieras con bancos como Citibank, Commerzbank y el Deutsche Bank.
El informe resalta que las sanciones económicas contra Venezuela, ordenadas desde Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea, “afectan y contraviene la letra y el espíritu de la Carta de las Naciones Unidas, pues destruyen a poblaciones inocentes”.
De Zayas manifestó que los efectos de las sanciones unilaterales y coercitivas aplicadas por los Estados Unidos y la Unión Europa contra el pueblo de Venezuela son considerados crímenes de lesa humanidad de acuerdo a lo establecido en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.
En este sentido, aquellos gobiernos que se adhieren o no condenan estas sanciones se convierten en corresponsables del agravamiento de la crisis económica y financiera que atraviesa Venezuela, la cual, ha profundizado la escasez de medicinas y ha promovido el acaparamiento de alimentos que luego son vendidos a precios del mercado especulativo generando un alza inflacionaria.
“Los coordinadores Humanitarios en Irak, Denis Hallyday y Hans-Cristof Von Sponeck calificaron de genocidas las sanciones multilaterales impuestas a gobiernos y países debido a que generan miles de muertos y trastornos económicos irreparables”, citó de Zayas en el informe.
En el caso venezolano, dice “que los efectos de estas sanciones que comenzaron con Obama y que siguen con la actual administración de Trump, con las medidas unilaterales de Canadá y la UE, han agravado directa e indirectamente la escasez de medicinas, lo que acarrea en demoras en su distribución y ocasionado numerosos casos de muerte”.
Al respecto, Zayas argumenta que este tipo de sanciones están orientadas al fracaso de los países que proponen un nuevo paradigma socio-económico distinto al capitalismo, cuestión que conlleva a la imposición de medidas coercitivas y unilaterales para lograr el fracaso de esas economías y a su vez justificar el cambio de gobierno.
A pesar de la intensa campaña mediática y las sanciones que pesa sobre Venezuela, en 2015 el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales señaló con satisfacción los progresos realizados por el Estado venezolano en su lucha contra la pobreza, la desnutrición y la disminución de la desigualdad, cuestiones que forman parte sustancial de la política social y de protección que ejecuta el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
El relator independiente de la ONU alertó sobre la intensificación de las sanciones y denunció que Estados Unidos se encuentra actualmente capacitando a abogados extranjeros quienes se encargarán de redactar propuestas legislativas orientadas a imponer nuevas sanciones con la finalidad de asfixiar a las instituciones del Estado venezolano.
“Algunos países prefieren prolongar el sufrimiento del pueblo venezolano con la expectativa que el país se sumerja en una crisis humanitaria para justificar la intervención militar”, expresó.
Amenazas e intimidaciones
De Zayas, indicó que una vez arribó a Venezuela, su estadía estuvo signada por la intimidación, además que pretendieron llevarlo a un “molde predeterminado” para forzarlo a modificar de algún modo el informe final, entre otras acciones que conminaban a no continuar con el trabajo.
En ese contexto —dice el experto— recibió cartas de algunas ONGs (Organizaciones No Gubernamentales), que pretendían, incluso “dictarme lo que debía llevar la conclusión final”.
El informe revela que a través de las redes sociales, fueron muchos los ataques de los cuales fue objeto, que le hicieron parecer una “incitación al odio” por parte de críticos “que no ven en un experto independiente, tenga un pensamiento autónomo y sopesado de pruebas”, se expresa en el informe.
La Mediación Internacional en medio de una “Crisis Humanitaria”
Zayas remarcó en dicho informe que en “Venezuela hay una crisis económica, que no puede compararse con la verdadera crisis humanitaria que se presenta en Yemen, Libia, Siria, Irak, Haití, Malí, la República Centroafricana, Sudán, Somalia o Myanmar”, según los datos que aporta la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Esta afirmación, recalca; que se sostiene en los informes de la FAO de diciembre de los años 2017 y 2018, “Venezuela no aparece en la lista dentro de las 37 naciones en crisis alimentarias del mundo y consideradas por el organismo”.
Tuvo libre movilidad
El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, señaló, en el inicio del 39 período de Sesiones de Derechos Humanos de la ONU, donde fue presentado el informe, que el “el experto independiente de Zayas tuvo libre acceso, libre movilidad, se reunió con la sociedad civil, con autoridades del Gobierno, con factores de la oposición, con las víctimas de la violencia, con los detenidos y sus familiares”, respectivamente.
Por otra parte, el canciller destaca que el experto reconoce la manipulación del precio internacional del petróleo, así como la calificación del riesgo país, además del ataque a la moneda y el contrabando de extracción de mafias internas y externas, sumándole a ello las medidas unilaterales para dictar sanciones de bloqueo económico contra el país, por parte de Estados Unidos.
Redacción Lechuguinos – Cortesía Alba Ciudad