EE.UU. reveló que su ‘Plan B’ luego de su retirada del acuerdo nuclear iraní incluye fuertes sanciones a Teherán.
Mike Pompeo, secretario de Estado del gobierno de los EE.UU. impondrá fuertes sanciones como parte de su nuevo plan de abordaje a la situación álgida con el Gobierno de la República Islámica.
El funcionario norteamericano enfatizó que estas sanciones serán «las sanciones más fuertes de la historia» con el objetivo de que el país persa tenga que elegir entre «financiar guerras en el extranjero o mantener su economía a flote».
Parece irónico que Estados Unidos hable de sancionar un gobierno por financiar guerras cuando ese es el pasatiempo favorito de su imperio desde hace mucho tiempo.
Uno de los acuerdos que Norteamérica pretende alcanzar con Irán en un futuro consiste en obligar a la nación islámica a informar detalladamente al Organismo Internacional de Energía Atómica sobre su programa nuclear y próximamente detener dichas actividades.
Continuamos con las ironías del acuerdo esperado. Ellos exigen que Teherán retire todas sus tropas de Siria y que no se le ocurra amenazar a su gran amigo Israel.
Al parecer hay aspectos de los programas nucleares y armamentista que son exclusivos de Estados Unidos y sus secuaces. Las declaraciones de Washington dan a entender que nadie más tiene derecho a tener programas de defensa.
La coalición imperialista son los autodenominados defensores supremos del mundo siendo su mejor método es continuar organizando guerras y armando a los grupos terrorista. Mientras tanto, las alternativas a su poderío son enemigos y según ellos un peligro para la paz que ellos tan seguido quebrantan.
Redacción Lechuguinos
