Washington ha amenazado a Caracas con represalias luego de que el Gobierno de Nicolás Maduro decidiera expulsar a dos diplomáticos estadounidenses de alto rango este martes. La acción se produjo tras la nueva imposición de sanciones antivenezolanas por parte de EE.UU.
Venezuela declaró como personas no gratas al encargado de negocios de la Embajada de EE.UU. en ese país, Todd Robinson, y el encargado de la sección Política, Brian Naranjo. Según el mandatario venezolano, Robinson y Naranjo «presionaron y amenazaron» a los eventuales candidatos a las presidenciales para que desistieran de sus intenciones.
Un funcionario del Departamento de Estado estadounidense indicó a AFP que Washington tomaría las «medidas recíprocas» apropiadas tras la expulsión. No obstante, señaló que EE.UU. no ha recibido notificación alguna de la misma de parte del Gobierno venezolano a través de canales diplomáticos.
Previamente, Maduro había explicado que, antes de tomar esta decisión, la Cancillería había entregado más de diez notas a la Embajada de EE.UU. en el país suramericano para exigirle rectificación por las declaraciones de sus funcionarios.
Tras la reelección de Maduro como presidente, el mandatario estadounidense, Donald Trump, había aprobado una orden ejecutiva en la que limita al Gobierno venezolano las operaciones de venta de deuda y activos públicos en territorio estadounidense. Trump indicó que esa acción tuvo como objetivo proteger el dinero del pueblo venezolano, que «ha sufrido inmensamente» bajo la Administración de Maduro.
Redacción Lechuguinos