El CNE pide a observadores internacionales no interferir en asuntos internos del país durante los comicios del 21 de noviembre.
En una resolución emitida este lunes el Consejo Nacional Electoral (CNE) indica que los observadores internacionales invitados a los comicios regionales y municipales, que se realizarán el 21 de noviembre en Venezuela, deberán mantener una conducta objetiva y no podrán interferir en los asuntos internos del país.
“Queda establecido que las instituciones y los organismos internacionales que acepten la invitación del poder electoral a presenciar este evento electoral, deberán apegar su conducta a los principios de; respeto a la soberanía de la República Bolivariana de Venezuela y no interferencia en los asuntos del país”, indica la disposición que regula la presencia de instituciones y organismos extranjeros con el carácter de observadores internacionales.
Conforme a la resolución, la relación entre el CNE y los observadores será de transparencia respecto a sus acciones, por lo que “cualquier actuación de sus representantes fuera de dicha relación será interpretada y valorada por el órgano rector en estricto apego a los principios constitucionales”.
El 29 de septiembre, la Unión Europea comunicó que enviaría una misión de observación electoral a Venezuela para seguir ‘in situ’ los comicios regionales.
En un acuerdo que firmó el CNE con la Unión Europea (UE), el bloque se comprometió a mantener una “estricta conducta de imparcialidad, objetividad, independencia y no injerencia en el proceso electoral y respeto a la soberanía”.
Por su parte, el CNE aseguró que garantizará a la misión europea la libertad de acceder a los espacios, actores y hechos relativos al voto.
Los Veintisiete decidieron enviar esta misión luego de determinar que el Gobierno de Nicolás Maduro había dado “pasos positivos”, como la composición más plural del Consejo Nacional Electoral, o una mejor relación con las organizaciones humanitarias que operan en el país. Esto, después de visitar el pasado julio Venezuela para evaluar las condiciones electorales del país.
El 7 de septiembre, el representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell nombró al embajador de la UE en Caracas y describió la designación como “un paso adelante en el restablecimiento de las relaciones entre Venezuela y la UE”.
El bloque europeo que, siguiendo los pasos de EE.UU., ha impuesto sanciones a Venezuela, ha dicho recientemente que el futuro de estas medidas coercitivas dependerá del resultado de los diálogos intervenezolanos en México.
Efectivamente, desde mediados de agosto está en proceso un diálogo entre el Gobierno de Maduro y la oposición (Plataforma Unitaria). Hasta el momento, se han celebrado tres rondas y logrado acuerdos parciales. Ambas partes aseguraron este mismo martes haber acercado posiciones.