Más de tres mil denuncias por violación a los derechos humanos a manifestantes en Colombia, recibió la CIDH en un informe detallado.
A un mes y 10 días de que la protesta ciudadana se volcara a las calles y se denunciaran con los días cientos de abusos y desmanes de la Fuerza Pública contra los protestantes, esta semana, entre el 8 y el 10 de junio, una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) estará en Colombia para escuchar y recibir información de diferentes sectores y así evaluar la grave situación de derechos humanos frente al escalamiento de la violencia durante las manifestaciones.
El Gobierno aceptó una visita de trabajo, acotada y específica, de este órgano internacional, independiente y autónomo, que integra la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y promueve, esencialmente, la defensa de los derechos humanos en la región.
Durante la visita de cuatro días, tres de los comisionados de la CIDH y sus equipos de apoyo estarán en Bogotá y Cali y esperan, especialmente, poder escuchar a las víctimas de violaciones a los derechos humanos y sus familiares. Al final de la visita, la delegación entregará observaciones generales y emitirá una serie de recomendaciones al Estado.
Y aunque la visita está lejos de conjurar la crisis, más ahora cuando la negociación entre el Comité Nacional del Paro y el Gobierno se suspendieron, sí es una esperanza para muchos sectores del país que esperan que fortalezca el camino del diálogo, a partir del reconocimiento y el esclarecimiento de las posibles conductas criminales de la fuerza pública.
Se conoció el documento que, desde la plataforma GRITA de Temblores ONG, el observatorio de derechos humanos de Indepaz y el Programa de Acción por la Igualdad y la Inclusión Social (PAIIS ) entregarán a la delegación de la CIDH. Durante el Paro Nacional, estas dos organizaciones de la sociedad civil han hecho una labor de recepción, triangulación, verificación, sistematización y registro de denuncias de violencia policial.
Desde el 28 de abril hasta el 31 de mayo registraron y verificaron que, al menos, ha habido 3.789 casos de violencia policial durante ese periodo.
“Dentro de los 3.789 hechos que hemos registrado, identificamos casos de agresiones físicas a los manifestantes (como golpizas y malos tratos), violencia verbal (como amenazas, insultos e intimidaciones), retenciones arbitrarias e injustificadas, casos de violencia sexual y basada en género, lesiones oculares y faciales, intervenciones violentas del ESMAD y la Policía, hostigamiento, policías activando armas de fuego contra la población civil, y policías junto a civiles disparando armas de fuego, entre otras prácticas de violencia policial”, dice el documento de 23 páginas.