La nueva jefa de la agencia de inteligencia gringa, pareciera no tener ni un poquito de remordimiento por los crímenes que ha cometido, incluso se atrevió a posar al lado del cadáver de una de sus víctimas
Además de haber dirigido torturas y cárceles secretas, la nueva directora de la CIA, Gina Haspel, pareciera que le llena de morbo asesinar personas por doquier, o por lo menos eso es lo que dejó en evidencia al tomarse una foto muy sonriente al lado de un cadáver de una de sus víctimas, demostrando su lado más ruin.
El prontuario criminal de Haspel es tan grande que ni los grandes medios de la derecha han ocultado su lado más oscuro, en un reciente trabajo sobre sus antecedentes, el diario EL País de España, reveló que “la designación de Haspel, en febrero de 2017 como subdirectora y ahora como directora de la CIA, se interpreta como una defensa de Trump a los abusos a detenidos. También por parte de Pompeo, que ha dicho que el waterboarding no es tortura y ha considerado-patriotas- a quienes lo utilizaron tras el 11-S”.
Sin duda que esta designación por parte de Donald Trump, tiene un significado claro y es que el crimen y la violación de derechos humanos, sea ejecutado en todo el mundo de manos de la más sangre fría y criminal funcionaria que tiene en su gobierno, como lo es la nueva directora de la CIA, Gina Haspel.
Redacción Lechuguinos
