Qué poquito le duró la Unidad a la Mesa de la desunión, ahora todos los opositores quieren desligarse del rayón que representa pertenecer a una bancada fracasada. Todos los dirigentes que desean salvar su vida política quieren darle palo a esta piñata.Ahora le tocó el turno al prófugo de la justicia venezolana, Mario Iván Carratú Molina, quien invitó a no “seguir lineamientos de la oposición casquivana”.
“Hay que ser bien pendejo para calárselas en estos momentos, por eso no me la calo más, no me pacto con nadie, ni me cuadro con nadie”, así dijo Carratú quien hasta hace unos meses apostaba todo por los líderes opositores.
Definitivamente dentro de la Mesa de la Unidad Democrática siguen sacando a relucir la hipocresía que los caracteriza sin importar que esto demuestre que están más divididos que nunca.
Redacción Lechuguinos