Al salir del Palacio Federal Legislativo, Juan Guaidó se encontró con una no muy grata sorpresa por parte del pueblo que se encontraba a las afueras.
Con una risa cínica recibió Juan Guaidó tremendo balde de agua que le regalaron algunos caraqueños a la salida del hemiciclo.
«Eres un tremendo vende Patria, traidor, arrastrado al Imperio«, le gritaban al autoproclamado, quien parece que ni siquiera sabe que es Patria.
«Usted debe ser tratado como enemigo de esta Patria», agregaba otro ciudadano, quien mostraba su desprecio por el títere de los gringos.
Todo esto ocurrió mientras el diputado en desacato con varios escoltas se subían a su lujosa camioneta y salían de las instalaciones legislativas.
Redacción Lechuguinos