Llega a 313 las agresiones a candidatos y candidatas que participarían en elecciones de este año en México.
En un clima dominado por la violencia, en México parece tradición que en temporada electoral los niveles de criminalidad lleguen a las nubes debido a las incontables agresiones a los que de alguna manera participan en la contienda democrática.
Un país gobernado por la derecha y que muchas veces se ha referido a la inseguridad en Venezuela, parece que tiene que enfocar sus esfuerzos en los crímenes políticos que ocurren a diario en su país.
Un informe realizado asegura que desde septiembre del 2017 al mes de mayo de este año se han reportado 98 ejecutados, trece secuestros, 85 amenazas, 34 agresiones físicas y 18 agresiones con armas de fuego, todos estos crímenes contra personajes políticos involucrados de alguna manera en las elecciones.
Además, en cuanto a los familiares se han presentado 34 atentados, 18 agresiones de las cuales 16 han sido con armas de fuego y diez asaltos con violencia.
Asimismo, Salvador Mora Velásquez, Investigador de la UNAM señaló que en los espacios donde se disputan los cargos entre personas vinculadas al narcotráfico, “evidentemente es donde más realza esta criminalidad con víctimas que tienen un peso político dentro de la política estatal o local”.
De igual forma, el informe indica que el 32% de las agresiones en contra de políticos se han desarrollado en 30 de los 32 estados de la nación mexicana y 225 municipios. Además se dirigieron de manera específica en contra a los opositores de los partidos gobernantes.
“Tenemos un problema donde el crimen organizado ha penetrado el poder político y está generando desestabilización”, destacó Mora Velásquez.
Finalmente, de acuerdo con un reportaje publicado por un medio mexicano la ola de violencia ha traído consigo la renuncia a la contienda de al menos 1000 candidatos por temor a perder la vida.
Redacción Lechuguinos
