ALBA-TCP denuncia que EE.UU. y sus aliados usan la pandemia del nuevo coronavirus como un arma para reforzar sus acciones ilegales.
El secretario ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos, ALBA-TCP, Sacha Llorenti, condenó el miércoles el hecho de que algunos países, como EE.UU., utilicen la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, como un arma para reforzar sus medidas “ilegales a la luz del derecho internacional”.
En una entrevista concedida al programa Cruce de Palabras, transmitido por la cadena Telesur, el funcionario boliviano declaró que es un “castigo colectivo” lo que aplica Washington y sus aliados contra quienes no responden a sus intereses, incluidos Cuba, Venezuela y Nicaragua.
“No es que han aliviado algo para que los pueblos puedan enfrentar mejor esta pandemia. Han utilizado la pandemia como un arma para continuar ejecutando este castigo colectivo”, afirmó Llorenti, al mismo tiempo que recordó, en concreto, que, en medio de la COVID-19, EE.UU. ha intensificado su bloqueo contra Venezuela.
Con todo esto, enfatizó que los países afectados por las medidas ilegales de EE.UU. han logrado resistir la “terrible ofensiva imperial”, gracias al nivel de conciencia política del pueblo y sus dirigentes.
Además, explicó que, a través de la ALBA-TCP, se ha creado un fondo humanitario para la compra de vacunas para países del Caribe Oriental, que son parte de la Alianza, con el que se han adquirido entre el 13 % y el 14 % de las dosis necesarias.
Son varios los países que sufren las sanciones unilaterales de Washington en medio de la COVID-19, las cuales han obstaculizado el acceso a fármacos y equipos médicos, complicando la lucha contra la pandemia y el proceso de importación de vacunas desde el exterior.
Caracas señala que todas las iniciativas de EE.UU. en su contra forman parte de una agenda hostil y belicista para perseguir y llegar a sus objetivos imperialistas en América Latina.