El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos y varias agencias fronterizas han tenido acceso a la geolocalización de millones de personas sin el consentimiento de éstas, denunció La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con reportes de la prensa internacional ACLU tuvo acceso a documentos confidenciales en donde se confirma que las empresas Venntel y Babel Street han otorgado datos privados de geolocalización a varias instancias de Estados Unidos como el Servicio Secreto, la Guardia Costera, la Patrulla Fronteriza, entre otras.
Asimismo ACLU mencionó que instituciones como la Patrulla Fronteriza de EEUU han generado bases de datos con 6.168 páginas con registros de localización, con al menos 336 mil lugares ubicados. En algunos casos, como en 2018, los registros acumulaban en tres días más de 113 mil reportes, es decir, 26 puntos de localización por minuto.
En muchos de los documentos obtenidos por esta organización se menciona que la información no contiene información personal, dado que los datos se asocian a un número y no a una persona.
Sin embargo, ACLU advierte que esto es falso dado que la información se usa precisamente para identificar patrones de vida de las personas, sin su consentimiento implícito, pues todos los datos de geolocalización se obtienen de aplicaciones que suelen pedir al usuario su autorización para recolectarlos.