EE.UU. ha jugado un papel preponderante en decenas de golpes de Estado en todo el mundo a través de estratagemas que materialicen sus intereses.
La implicación de Washington en el cambio de gobiernos se ha realizado a través de acciones abiertas y encubiertas, destinadas a alterar la estructura política de los países, mdiante golpes de Estado.
En la segunda mitad del siglo XIX, Washington inició acciones para el cambio de gobiernos democráticos, principalmente en América Latina y el Pacífico sudoccidental. A principios del siglo XX, Estados Unidos formó o instaló gobiernos amigos en muchos países del mundo, incluidos Panamá, Honduras, Nicaragua, México, Haití y la República Dominicana.
Tras la Segunda Guerra Mundial en 1945, EE.UU. se enfrentó con la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) por el liderazgo y la influencia en el contexto de la Guerra Fría. Washington logró extender el alcance geográfico de sus acciones intervencionistas más allá de su área de influencia tradicional de operaciones, es decir América Latina.
Las operaciones significativas de la Casa Blanca incluyeron el golpe de Estado en Irán en 1953, orquestado por EE.UU. y el Reino Unido; la invasión de la Bahía de Cochinos de 1961 y el apoyo al derrocamiento de Sukarno por el general Suharto en Indonesia.
Además, Washington ha interferido en las elecciones nacionales de muchos países, como en Japón en las décadas de 1950 y 1960, Filipinas (1953) y El Líbano, donde trató de ayudar a los partidos cristianos en las elecciones de 1957. El diario estadounidense New York Times informó el pasado febrero que Washington había ejecutado al menos 81 intervenciones evidentes y encubiertas en elecciones extranjeras durante el periodo comprendido entre 1946 y 2000.
Tras la disolución de la URSS, EE.UU. ha liderado o apoyado guerras para establecer gobiernos afines a su ideología en varios países. Los objetivos declarados de Washington en estos conflictos han incluido “luchar contra el terrorismo”, como la guerra de Afganistán en 2001, o eliminar los “regímenes dictatoriales” en la guerra de Irak en 2003 y la intervención militar en Libia en 2011. Actualmente, los tres países sufren de inestabilidad debido a las políticas injerencistas de EE.UU.
A continuación, les presentamos los nombres de los países donde Estados Unidos estuvo vinculado con golpes de Estado (algunos fallidos).
Reino de Hawái (1893), China (1989-1901), Panamá (1900), Honduras (1900-1920), Nicaragua (1912-1933), Haití (1915-1934), La República Dominicana (1916-1924), Rusia (1918), Panamá (1941), Italia (1943-1946), Francia (1944-1946), Bélgica (1944-1945), Alemania (1945-1949), Austria (1945-1955), Japón (1945-1952), Corea del Sur (1945-1948), Guerra de Corea (1950-53), China (1941-1979), Grecia (1944-1949), Filipinas (1944-1954), Italia (1947-1970), Venezuela (1948), Siria (1949), Egipto (1952), Irán (1953), Guatemala (1954), Laos (1955-1960), Siria (1956), Siria (1957), Indonesia (1957-1959), El Líbano (1958), Irak (1959), la República Democrática de Congo (1960), Laos (1960), la República Dominicana (1961), Cuba (1960), Laos (1961-1975), Brasil (1961-1964), Irak (1963), Vietnam (1963), la República Dominicana (1965-1966), Indonesia (1965-1967), Grecia (1967), Camboya (1970), Bolivia (1971), Irak (1972-1975), Chile (1973), Paquistán (1977-1988), Colombia (1979-1993), Afganistán (1979-1989), Polonia (1980-1989), El Salvador (1980-1992), Nicaragua (1982-1989), Panamá (1989), Kuwait (1991), Haití (1991), Irak (1991-2003), Irak (1994-2000), Indonesia (1997-1998), Venezuela (2002), Irak (2003), Siria (2005), Siria (2011-2019), Libia (2011), Yemen (2015).
Sin dudas, uno de los golpes de Estado más conocido en el Oriente Medio en el siglo XX es el perpetrado contra el Ejecutivo del primer ministro iraní Mohamad Mosadeq, que se saldó con la muerte de decenas de ciudadanos iraníes.
Mosadeq fue derrocado el 19 de agosto de 1953 mediante un golpe, identificado en los archivos de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA, por sus siglas en inglés) como la “Operación Ajax”, que consistió en un plan conjunto del Reino Unido y Estados Unidos para sacar del poder al premier iraní por haber nacionalizado la industria petrolera. El movimiento puso fin al monopolio de cuatro décadas del Reino Unido sobre la industria petrolera de Irán.
En represalia por la medida de Mosadeq, Londres y Washington impusieron severas sanciones económicas contra el sector petrolero del país persa, pero, cuando se dieron cuenta de que las sanciones no eran efectivas, los dos países decidieron materializar un golpe de Estado en Irán.
El Departamento de Estado de EE.UU. desclasificó en 2017 los documentos de archivo que confirman la implicación estadounidense en el golpe militar en Irán, que restauró en el poder al último monarca persa, Mohamad Reza Pahlavi. En el año 2013, la CIA reconoció oficialmente su involucramiento en este episodio de la historia iraní.
Redacción HispanTV