El triunfo de la izquierda en Argentina, Uruguay y Bolivia tiene temblando a los gobiernos neoliberales que son lacayos del imperio norteamericano.
Los triunfos de la izquierda en las elecciones presidenciales que se han llevado a cabo en Argentina, Uruguay y Bolivia, tiene a más de un mandatario liberal chillando por los rincones, ya que saben que pronto le llegará el fin a sus gobiernos neoliberales, que dejan una herencia de hambruna, desigualdad y endeudamiento con el FMI.
El estallido social que se ha venido presentando en países como Ecuador, Perú, Haití, Nicaragua y Chile, ante el descontento social, están ligadas a la fuerte crisis estructural del neoliberalismo en América Latina.
Luego de la victoria de la fórmula kirchnerista en Argentina, el gobierno estadounidense, presidido por el pelucón de Donald Trump, ve con preocupación la fuerte alianza regional que se ha venido creando entre los líderes latinoamericanos, puesto que entorpecen sus oscuros planes para Sudamérica.
Para los mandatarios liberales, como Iván Duque, Jair Bolsonaro y Sebastián Piñera, es un duro golpe y un anticipo a lo que les espera en las respectivas elecciones presidenciales que se llevarán a cabo en sus países, debido a que se espera el despertar de los pueblos que presiden, y así dichos mandatarios no podrán satisfacer las fantasías del imperio norteamericano.
Redacción Lechuguinos.
