El gobierno del pelucón de la Casa Blanca ha tomado la medida más radical para disuadir a los extranjeros de entrar clandestinamente a Estados Unidos con sus hijos menores de edad.
Un total de mil 995 niños y menores de edad fueron separados de sus familias inmigrantes entre el 19 de abril y el 31 de mayo de 2018, como parte de las medidas antiinmigrantes que aplica Estados Unidos en la frontera.
Así lo informó una fuente del Departamento de Seguridad Interior estadounidense, en el que precisa que los menores de edad fueron separados de unos mil 940 familiares adultos, quienes se encuentran arrestados en espera de un proceso judicial por ingresar ilegalmente a EE.UU.
De acuerdo con un portavoz de la Casa Blanca, Donald Trump seguirá aplicando la medida sin importar las consecuencias, a pesar que de que ha generado rechazo en todo el país.
Es así como de manera arbitraria, el gobierno estadounidense pretende hacer valer sus políticas, llevándose por delante a menores, que son víctimas del sistema que el mismo país ha alimentado y por el que salen de sus tierras en búsqueda de mejores condiciones de vida.
Redacción Lechuguinos
