La represión es un concepto que está muy ligado a la policía argentina, pues desde la muerte de Santiago Maldonado los «funcionarios de seguridad» cumplen las órdenes macabras de Mauricio Macri para arremeter contra los más desprotegidos, en este caso, un niño de apenas 11 años e edad.
Un niño de 11 años de edad fue asesinado de un disparo en la nuca en la provincia argentina de Tucumán (noroeste) después de que la policía intentara detenerlo cuando circulaba en una moto, denunció la organización no gubernamental Abogados del Noroeste en Derechos Humanos (Andhes).
El menor «fue asesinado de un disparo en la nuca», señaló la organización en su cuenta oficial de Twitter.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del jueves, cuando el menor Francisco Burgos, quien iba de acompañante en una moto conducida por un adolescente de 14 años, recibió el impacto mortal después de que la Policía de Tucumán los intentara detener por «circular de forma sospechosa», según manifestó el Gobierno provincial en un comunicado.
El niño perdió la vida al instante, mientras que su compañero recibió un disparo en la pierna y además fue herido de forma leve en la cabeza a raíz de la bala que salió por la frente de su amigo.
Los dos policías acusados de matar al menor fueron interrogados durante la mañana del jueves y sus armas reglamentarias fueron confiscadas, pero después fueron puestos en libertad dado que la justicia no encontró indicios para proceder a su detención.
El subjefe de Policía, Francisco Picón, informó que los agentes comenzaron a perseguir a seis jóvenes que se desplazaban en tres motocicletas por la capital tucumana.
Llegado un momento, los conductores de las motos comenzaron a disparar, «lo que obligó al personal policial a repeler la agresión», según la versión ofrecida por la gobernación que dirige Juan Luis Manzur.
«Si la gente no se hubiera arrimado (al lugar donde cayó el niño sin vida), lo matan«, aseguró la madre del menor de 14 años al diario local la Gaceta.
Lo sucedido, enmarcado por la ONG Andhes como un caso de gatillo fácil, se suma al asesinato de otros dos jóvenes a manos de la policía provincial durante el mes de febrero: Víctor Robles, de 16 años y Ángel Alexis Noguera, de 22.
Las actuales políticas públicas en materia de seguridad que alienta el Gobierno de Mauricio Macri ponen de nuevo en discusión la actuación de las fuerzas de seguridad que son avaladas por el Ejecutivo.
Caso Chocobar
Hace unas semanas, el mandatario reivindicó el proceder de un policía local, Luis Oscar Chocobar, quien mató por la espalda a un joven de 18 años que había asaltado y apuñalado a un turista en Buenos Aires.
El agente fue procesado por homicidio agravado en dos instancias procesales, pero el mandatario cuestionó públicamente a la justicia y defendió, a través de su ministra de Seguridad, un cambio de doctrina en los casos de enfrentamientos donde intervengan fuerzas de seguridad.
Con información de Sputnik News
Redacción Lechuguinos
