Finalmente se consumó el golpe de Estado en Brasil al destituir a Dilma Rousseff
Tras doce meses de proceso judicial, el Senado de Brasil consumó este miércoles el golpe de Estado parlamentario contra la presidenta constitucionalmente electa Dilma Rousseff, al apartarla de forma definitiva de sus funciones como manadataria.
El Senado brasileño destituyó este miércoles de la jefatura del Estado a Dilma Rousseff pero decidió mantener sus derechos políticos. En la votación, 42 senadores se inclinaron por inhabilitar a Rousseff, 36 votaron a favor de mantenerle los derechos y 3 se abstuvieron, por lo que no se alcanzó los dos tercios (54 votos) de la Cámara alta necesarios para aprobar este tipo de mociones.
La separación del gobierno de la Presidenta, sin que se presentara ninguna evidencia de delitos de corrupción ni crímenes de responsabilidad, y con ella del Partido de los Trabajadores (PT) y otras fuerzas políticas de izquierda aliadas, constituye un acto de desacato a la voluntad soberana del pueblo que la eligió.
Ante este golpe, el presidente interno Michel Temer se mantendrá como dirigente del país hasta los comicios electorales de 2018, a pesar del rechazo de miles de brasileños, quienes se mantuvieron movilizados en toda la nación desde el comienzo del proceso judicial que fue denunciado en diversas ocasiones por expertos y líderes mundiales como un acto para derrocar a Rousseff.
Por su parte, Rousseff presentará apelaciones al Tribunal Supremo de Brasil, sin descartar, también, la posibilidad de acudir a juzgados internacionales.
Redacción Lechuguinos
