El diputado opositor llego de su viaje conspirativo exigiendo que la OEA y Almagro organicen unas elecciones presidenciales en el país
Después de salir del país sin pasaporte, en una cruzada internacional para lograr la intervención contra Venezuela, el diputado y militante de Voluntad Popular Luis Florido, regresó al país con las pilas conspirativas recargadas pero las neuronas más secas que antes de salir.
Florido, en su paseo por el mundo quien sabe con qué oscuro financiamiento e inventando situaciones catastróficas del país, fue hasta la Corte Interamericana de los Derechos Humanos, a solicitar medidas de protección debido a que sus derechos e integridad personal están “en riesgo por persecución política”.
El diputado opositor en declaraciones dadas a la prensa insistió en la ruptura total del dialogo entre el gobierno y la oposición, es decir, que la única forma probable de volver a la paz, según la derecha venezolana es que el presidente Maduro renuncie o que continúe el terrorismo instaurado por ellos.
La otra descabellada opción que trae de su viaje este golpista de Florido, es que se llame a elecciones presidenciales, eso sí, organizadas y supervisadas exclusivamente por la OEA y el cachorro imperial Luis Almagro, como si en este país no existiera un poder electoral establecido para tal fin “ya no cabe la palabra diálogo, aquí en todo caso tiene que producirse es un proceso de negociación para una salida electoral en Venezuela patrocinado desde la OEA y los países miembros de manera que se pueda impulsar un cambio ordenado”, expresó Florido.
Llamó poderosamente la atención que en el aeropuerto Internacional Simón Bolívar, en Maiquetía, Luis Florido fue recibido con bombos y platillos por los diputados y hasta ahora cabecillas de la oposición Henry Ramos Allup, Freddy Guevara, entre otros, lo que hace pensar que este debe haber traído un liderazgo maquiavélico de ese viaje, que hace estos dos sátrapas no quieren despegarse de él.
Redacción Lechuguinos
