La diputada María Gabriela Hernández fue expulsada de las filas de VP en diciembre
VP y Primero Justicia ya tienen la guerra declarada, después de todo no serán los primeros partidos opositores en emprender una feroz disputa por el liderazgo opositor.
Las disputas internas entre partidos opositores integrantes de la MUD son conocidas por todos. Las toldas que más riñas han tenido son las del famoso G4, que por ser las más grandes de la coalición opositora, se mantienen en una constante lucha por el liderazgo total en la oposición venezolana. Estas rencillas irremediables han llevado a los partidos opositores a empreder una feroz guerra que contempla la traición, muchas puñaladas traperas y por supuesto la incorporación a sus filas de dirigentes que antes militaban en la tolda enemiga y que pueden servir de informantes.
Esto fue precisamente lo que sucedió con María Gabriela Hernández, diputada a la AN por el estado Monagas, quien luego de ser expulsada de las filas de Voluntad Popular, decidió saltar la talanquera al partido aurinegro, Primero Justicia.
A finales del 2016, la diputada en desacato, María Gabriela Hernández saltó la talanquera del partido guarimbero y neofascista, Voluntad Popular (VP) al parecer esta representaba una traba para los oscuros planes de la tolda naranja en el estado Monagas.
Al parecer, Hernández no es del agrado de Carlos Vecchio y Freddy Guevara, quienes desde el mes de octubre le habían dado un ultimátum a la dirigente monaguense para que se alejara de sus estrechas relaciones con el adeco Ramos Allup y la desquiciada María Corina Machado.
La parlamentaria, ya había perdido toda toma de decisión sobre VP en su estado, razón que la hizo tomar la decisión de saltar del barco no sin antes “prender el ventilador” con una carta privada dirigida exclusivamente al asesino y jefe de ese partido Leopoldo López y salpicar a todo aquel que tuviese jefatura y poder de decisión dentro del partido guarimbero Voluntad Popular.
La incorporación de Hernández a las filas de Primero Justicia representa una preocupación para el partido neofascista Voluntad Popular, pues esta podría servir de informante sobre los planes, estrategias e intenciones de su antigua tolda y prevenir al partido aurinegro para que este pise adelante.
Redacción Lechuguinos